Ir al contenido

No hay magia, hay proceso

Por qué no vas a cambiar 30 años de estrés con 15 días de capsulas

“Hace dos semanas que tomo melena y no noto nada...”

“Me dijeron que el reishi era para dormir mejor pero yo sigo con insomnio.”

“Pensé que la piel con tremella me iba a quedar luminosa y no veo cambios…”

Y ahí es cuando respiramos hondo y decimos:

Amor, pará. Escuchame.

Tenés 30, 40 o 50 años de vida con:

  • Alimentación ultra procesada
  • Sueño fragmentado y sin horarios
  • Cortisol por las nubes
  • 15 años de café en ayunas
  • Picos de azúcar y bajones de energía
  • Pantalla desde que abrís los ojos hasta que te dormís
  • Cero pausa
  • Cero contacto con la naturaleza
  • Cero escucha del cuerpo

Y ahora pretendés que con 15 días de cápsulas todo se acomode mágicamente.

Pues no.

Los hongos no son una pastilla mágica.

Son un camino de vuelta al cuerpo.

Los extractos de hongos medicinales (melena de león, reishi, tremella, cordyceps, etc.) no son parches.

No están diseñados para tapar síntomas.

Son adaptógenos: acompañan al cuerpo a encontrar su equilibrio.

Pero eso lleva tiempo.

👉 La melena empieza a nutrir tus neuronas, pero si hace años que estás al palo y no parás nunca...

👉 El reishi regula el sistema nervioso, pero si no hacés una pausa ni para respirar...

👉 La tremella hidrata la piel desde adentro, pero si tomás 1 litro de coca y cero agua al día…

¿Ves por dónde vamos?

Esto es un camino. No un hechizo.

Las fórmulas naturales funcionan.

Claro que sí.

Pero funcionan cuando hay coherencia.

Cuando empezás a sumar descanso, mejor comida, más agua, más sol, más silencio.

Cuando no esperás que un gotero haga solo el trabajo que vos también tenés que hacer.

La medicina del bosque es lenta, pero profunda.

Si querés resultados rápidos y falsos, hay mil pastillas que te lo prometen.

Pero si querés salud real,

vas a tener que acompañar el proceso.

🌿 Día a día.

💧 Gota a gota.

🔥 Elección a elección.

Porque no hay magia, hay constancia.

Y ahí, en esa constancia amorosa con vos mismx,

vas a ver cómo un día…

te levantás y decís:

"Che… estoy durmiendo mejor"

"Tengo más claridad"

"Me siento más liviana"

Y ni te diste cuenta cuándo pasó.

Pero pasó.

La salud no se fuerza.

Se cultiva.


Iniciar sesión dejar un comentario
¿Dónde quedó el deseo?
Vitalidad, cansancio crónico y el regreso a lo esencial